La corrosión por contacto en rodamientos ocurre cuando se presente un movimiento relativo entre el rodamiento y su alojamiento o eje donde se encuentra montado. Esto puede suceder en condiciones de alta humedad, exposición al agua o presencia de productos químicos corrosivos. También se puede producir por un ajuste inadecuado y errores en las formas del rodamiento.
La corrosión por contacto en tus rodamientos puede causar una serie de problemas. La corrosión debilita las superficies de los rodamientos, lo que resulta en una disminución de su vida útil y un aumento de la fricción y el desgaste. Estos efectos pueden llevar a un funcionamiento deficiente de tu maquinaria, vibraciones, ruidos anormales e incluso fallos prematuros.
Para prevenir la corrosión por contacto en tus rodamientos, es importante que tomes medidas de protección adecuadas. Aquí te presento algunas estrategias comunes:
- Selecciona el ajuste correcto: Realiza una correcta selección del ajuste previo al montaje del rodamiento.
- Selecciona los sellos adecuados: Utiliza sellos y barreras para proteger tus rodamientos de la exposición directa a la humedad y a los contaminantes.
- Realiza mantenimiento regular: Inspecciona y da mantenimiento periódicamente para identificar y tratar cualquier señal de corrosión o deterioro en tus rodamientos.
- Utiliza pastas anticorrosivas: Previo al montaje, puedes aplicar una pasta anticorrosiva como la LAGF para prevenir estas condiciones de falla.
Recuerda que es importante tener en cuenta que las condiciones específicas de operación y tu entorno de trabajo pueden variar, por lo que te recomendamos que consultes las recomendaciones del fabricante de tus rodamientos y sigas las mejores prácticas de mantenimiento para evitar la corrosión por contacto.